Ayer que no tenía nada qué hacer decidí que llevaría mis libros a la casa nueva, por lo que empecé a juntar sólo aquellos que había comprado yo de mi dinero mío ganado con el sudor de mi frente, además de mis DVD's de películas, series y anime para arrumbarlos allá también, sin embargo, la picazón de no tener tele nos carcomía a mi novio y a mí, por lo que rascamos por todos lados y logramos reunir el dinero suficiente para una tele y un devedé, que según la página de Sam's, nos harían felices por lo menos durante unos 2 años en lo que compro mi Blue-Ray o como se llame y mi home theater, así que la misión se amplió a: comprar una tele y un dvd, y arrumbar mis cosas en la casa. Ya que andaba por ahí adjunté uns vasos y botes de plástico para la basura, eché todo en la cajuela y me lancé a la aventura (bueno, no, en realidad sólo fui a la ciudad vecina). Durante el camino lo más destacado fue: un tipo que me rebasó en unos topes para después ir lentísimo y con la pena pero lo tuve que rebasar, y que había un pastizal incendiándose pero así cabrón, tanto que el humo no dejaba ver bien la carretera. Llegando a la ciudad, rápido nos lanzamos por los electrónicos (ja, ja), y aún más rápido nos fuimos a la casa a probarlos, por aquello de la garantía y el cambio físico, you know. En cuanto comprobamos que sí servían, nos fuimos a botar mis pertenencias y de ahí se rompió una taza y cada quien para su casa, porque obviamente, aún no vivimos ahí de fijo. No sé si alguien más lo haya sentido, o yo me emociono demasiado, pero el tener tanto en tan poco tiempo a veces es un poco abrumador, y no se sabe ni de dónde vas a jalar para lograr salir adelante, y a la vez, te sorprendes de cómo algunas personas te van apoyando lo suficiente para que tengas confianza y digas, a huevo sí puedo con esto. Lo digo por la sorpresota del aire acondicionado que nos regaló mi papá, por la membresía de Sam's y la vajilla que me obsequió mi cuasisuegro, por las cortinas que nos costuró mi causisuegra, el paro enorme que nos hizo mi mamá con los papeles del crédito. Tanto, pero tanto, que no lo pondré aquí porque es demasiado, y lo poco que menciono es sólo una parte del conjunto. Ah pero eso sí, aún nos faltan un montón de cosas, así que ya saben, quien quiera sentirse mega altruista y filántropo, o quiere nivelar su karma cargado de pecados y malas acciones, bien puede regalarme/donarme/cederme un refri, una estufa, una lavadora o ya de perdidas un sofá...¡Inscripciones abiertas!
La inauguración oficial será hasta que mínimo tengamos refri, snif.
4 comentarios:
"La inauguración oficial será hasta que mínimo tengamos refri, snif."
...claro...para tener donde guardar las chelas...jajajaja
la estufa esta sobrevalorada... ahora se pueden hacer tantas cosas con un horno de microondas y uno eléctrico.
Aaaww, yo quiero mi estufa para ser toda una ama de casa desesperada a la que se le queme el pollo en el horno y corra con la vecina para ver cómo lo puede arreglar...so cliché y encantador :D.
Yo vivo felíz sin un refri, no se por que tanta prisa, bueno refri si tengo, pero se descompuso y no tengo dinero para arreglarlo snif snif. Pero aún asi soy feliz.
Y...... que tele se compraron??
Publicar un comentario